Ella tenía el sueño de casarse y tener una familia, pero el tiempo pasaba y parecía que nada ocurría en esa área de su vida.
Hasta que un día ella percibió sus miradas… Él no era su tipo, pero comenzaron a conversar y cuando menos lo esperaba, se vio apasionada. Decidieron salir juntos, todo dentro de lo normal, él le pidió que fuera su novia delante de sus padres y todo parecía perfecto, hasta que, con el tiempo, poco a poco, él se cambió…
Un muchacho grosero tomó el lugar del caballero que había conocido. Un mandón y abusivo, tomó el lugar de aquel que respetaba sus opiniones. La cosa fue empeorando hasta el punto de no reconocer a aquel extraño que ahora sonreía frente a todos sujetando su mano con cariño disimulando, pero por detrás la maltrataba y abusaba verbalmente.
A pesar de todo eso, ella no quería perderlo. ¿Cómo comenzar todo de nuevo?
Nunca voy a encontrar a otra persona, piensa ella.
Queridas amigas, las señales son evidentes ¿y saben lo que tengo para decirles?
¡Mereces algo mejor que eso!
Usa tu fe, sé violenta con tu corazón bandido y engañador y toma la decisión dolorosa que, finalmente, te bendecirá.
Nanda Bezerra
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