Está saliendo con alguien y toda su vida gira en torno a esta relación.
Usted nunca más llama ni busca tener tiempo para las amigas, pues ahora todo su mundo está totalmente volcado para esa relación.
Usted prácticamente deja de vivir su vida, deja de crecer, pues ahora todo es en función de él. Es solamente un noviazgo , pero usted se entrega de tal forma que acaba transformándose en una persona dependiente, insegura y muchas veces hasta “pegajosa”.
Llama cada hora, quiere saber donde él estuvo, con quien habló, para quien miró… Quiere controlar la vida de él en todos los sentidos.
Esa actitud en muchas mujeres es la receta correcta para que la relación fracase.Y peor: cuando todo termina, usted se siente sola, perdida y con su autoestima totalmente destruida.
Queridas amigas solteras, entrar en una relación es algo serio, pero no quiere decir que su vida necesita parar o girar totalmente en torno a aquella persona.
No conozco a un hombre siquiera que admire a una mujer insegura y pegajosa. Y actitudes como las mencionadas muestran exactamente eso.
Lo mejor para cambiar este cuadro es estar ocupada. Su vida necesita continuar. No se anule. Continúe dando atención a sus amigas, familia, y encuentre tiempo también para dedicarse a las cosas de Dios. Busque formar parte del grupo de evangelización u otro grupo en la iglesia. Involucrese.
Esto va ayudarle en su relación con Dios, con su novio y su autoestima también.
Si usted no está en una relación en este momento, sabrá como actuar cuando llegue el momento.
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