Valorando las victorias…

Cuando visité Brasil recientemente, me encontré con una amiga que conocí en Sudáfrica. Habían pasado unos 6 años desde la última vez que estuvimos juntas. Al verme, comenzó a llenarme de elogios sobre cuán diferente estaba yo, cómo había cambiado mi aspecto para mejor, y mientras ella hablaba, lo comparé con aquello que sentía dentro de mí… ¡y nada era igual!

Dentro de mí, estaba frustrada conmigo misma, pues estoy en la lucha por bajar de peso y de mejorar (pues no debemos parar de querer ser mejores). Tengo un objetivo que quiero alcanzar y mientras no alcance esta meta, no voy a quedarme quieta. Pero hasta que llegue, hay barreras que debo traspasar, y cuando nos encontramos con ellas nos frustramos, ¿no es cierto? Así es… Me di cuenta de una cosa. Una guerra está compuesta por muchas pequeñas batallas, y cada pequeña batalla que vencemos aumenta nuestra victoria. Aun no vencí mi guerra, pero ya vencí muchas batallas. Y hoy voy a celebrar algunas victorias: Ahora le doy valor a mi aspecto. No estoy esperando adelgazar para comenzar a cuidar de mi apariencia.

• Ahora me amo más – ya no me veo como una gorda fea. No – soy una fofa linda, jajajaj.
• Ahora tengo más disciplina con mi alimentación, aunque aún no vea los resultados.

Queridas, si nosotras no paramos para reconocer y celebrar las pequeñas victorias, ¿cómo tendremos motivación para continuar persiguiendo nuestra meta mayor y vencer la guerra?

Motlatsi Bernardino