“Las muchas aguas no podrán apagar el amor” (Cn. 8:7)

Nuestra relación con Dios y con nuestro cónyuge debe estar en nuestra lista de prioridades. Sino, podemos permitir que alguien o algo cree una brecha entre nosotros y la persona que tanto amamos.

Si queremos relaciones sanas tenemos que aprender a mantener alejado el conflicto. Dios creó a cada uno de nosotros como individuos únicos. Tenemos personalidades y temperamentos distintos, así que no ha de sorprendernos que de vez en cuando haya roces.

Hace falta madurez para poder llevarnos bien con alguien distinto. Hace falta paciencia para no discutir por cosas menores. Si queremos mantener alejado el conflicto, tendremos que aprender a pasar por alto algunas cosas. Todos tenemos defectos, no debemos esperar la perfección en quienes nos rodean.

No importa cuán grandiosa sea una persona y lo mucho que la ame, habrá ocasiones en las que se sentirá ofendido(a) porque no existe el cónyuge perfecto. Si esperamos que el otro sea perfecto, nos frustraremos y nos sentiremos desilusionados.

La Biblia nos enseña que el amor debe dejar pasar lo que no nos agrada del otro. Es decir que tenemos que pasar por alto algunas cosas. Deje ya de esperar la perfección de parte de su esposo o de su esposa y aprenda a mostrar algo de tolerancia. Si así lo hace la vida de a dos puede ser mucho mas feliz, y usted será considerado/a la persona ideal.

Este sábado 21 entregaremos el Sello del Amor, para que sea colocado sobre el corazón de las personas, como dice la Biblia: “Ponme como un sello sobre tu corazón”, (Cantares 8:6). Todos los que tengan problemas de pareja o no puedan ser felices en el amor, acérquense a participar este sábado a las 19 en Av. Corrientes 4070.