1. ¡Crea!
Eso no son solo palabras, no. Usted necesita creer en su bendición. Creer que ella llegará en el momento correcto, Dios le dará. ¿De que sirve practicar otras cosas si usted no cree que lo que tanto quiere realmente acontecerá? Piense en eso. ¿Será que realmente cree? ¿Será que confía realmente en Dios?
Hablar que cree es fácil, pero ¿Usted ha actuado como una persona que confía? Hágase esa pregunta…
2. Vigilando, orando y actuando. Percepción es la clave.
Emociones y sentimientos, son como gasolina y fuego en la ansiedad. Usted necesita ejercer su fe y pedir a Dios que le de percepción. Eso es para percibir inmediatamente cuando esos dos elementos empiezan a unirse para incendiar. ¡La alarma de incendio necesita entrar en acción inmediatamente! En ese momento, tiene que actuar… ¿Cómo? Ahí es con usted amiga. Rechace las emociones y los sentimientos. ¡Use su fe! Pare de pensar en aquello, salga de las emociones y siga adelante.
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