viernes, 5 de julio de 2013

Las Emociones …

Cuando hablamos de hombre de Dios, ¿cual es la primera imagen que viene a su mente?

Camisa de vestir, corbata, micrófono en mano y la predicación sobre el altar?

No necesariamente…El hombre de Dios no se caracteriza por la ropa que viste, ni tan poco por estar en el altar.

Recuerdo que después de mi conversión, tenía una idea bien clara de aquello que quería: casarme con un hombre de Dios.

Cuando decidí dar un ultimátum a Júnior (mi novio en ese entonces, y ahora mi marido), era porque esa visión ya existía dentro de mí y mis emociones no podían detenerme en mi camino. Yo sabía lo que quería y luché mucho por eso.

Poco a poco, empezó a cambiar, y ver que eso sucedía delante de mis ojos fue realmente maravilloso. Fue cómo ver a Dios amoldandolo para mí… Pero yo esperé. Observaba sus actitudes, su carácter, su fe… Y un año después de su conversión fue que decidimos casarnos.

Él no era pastor en aquella época, pero ya era un hombre de Dios, temeroso a su Señor, y de carácter
firme. Insistí en comprobar, y veo eso hasta hoy.

Vean bien, amigas, quise tratar este asunto porque he recibido e-mails de jóvenes que ya se dicen apasionadas por un pastor o un obrero sin ni siquiera haber conversado con él. Solamente de observarlos a distancia.

¿Cómo usted puede dejarse llevar por sus emociones de esta forma? ¿Cómo usted puede decir que ama a alguien que ni siquiera conoce?. Solamente el hecho de que sea obrero o incluso pastor, no quiere decir que sean verdaderamente de Dios. Muchas ya cayeron en esta trampa. ¡No caiga usted también!

Usted necesita conocer el carácter de él, prestar atención a las cosas que él habla, las cosas que le interesan… Usted necesita tener la seguridad de que él es verdaderamente temeroso y fiel a Dios. ¡Asegurese que él es un hombre de Dios!

Y más: si él tiene visión hará lo mismo con usted.

Lo que veo acontecer es mucha prisa en “resolver” enseguida la vida sentimental y muchas ni se importan con eso, están listas a entregar sus vidas y futuro en las manos de alguien que ni conocen…

Por eso, a partir de hoy sus emociones con relación la vida sentimental necesitan estar bajo control.

Nada de dejarse llevar sólo por una mirada… Si usted tiene una relación, va a comenzar a observarlo hasta tener la certeza de que él es realmente un hombre de Dios—y nada de emoción.

Si tuviera que actuar y terminar el noviazgo por no ver en él el carácter de Dios, no dude ni tema. Si decide luchar por él, hágalo en la fe, pero también consciente, sabiendo quien él es de verdad.

Si usted aún no tiene novio, sea consciente de los pasos que va a necesitar tomar cuando llegue el momento. Y una vez más repito: no se dejen llevar por sus emociones.


¡Cuidado para que las emociones no la devoren!

Nanda Bezerra

No hay comentarios:

Publicar un comentario