Siempre viví en un hogar bien estructurado, padres felices y armonía dentro de casa. Pero infelizmente la realidad de este mundo no es así. Siempre vi lágrimas, sufrimiento y dolor en los ojos de personas conocidas, y por detrás de todo esto estaba un hogar destruido.
Siempre tuve una madre para instruirme, un padre para educarme. Nunca vi a mis padres separados o peleados. Pero de nada vale tener un hogar estructurado, si yo misma no tengo equilibrio.
Por más que su entorno sea agradable, cuando usted está sola todo es muy diferente.
Una sabe que sus sonrisas son falsas y momentáneos. Y mientras usted no encuentre la Verdad, no sirve de nada tener una familia unida, ellos pueden ayudarte y apoyarte, pero no se puede vivir la vida entera arrinconado a una pared…
Por otro lado están los que no tiene una “familia”, y no es difícil encontrar uno de estos casos: madres solteras, padres sin equilibrio, egoístas, viciados, hermanos que parecen extraños…etc. Cada uno vive para sí mismo.
Para mí la respuesta es la misma. Hasta que el equilibrio no exista dentro de usted, y su familia no vea su cambio, usted no podrá llevarlos también a conocer la verdad.
‘’…y conoceréis la Verdad, y la Verdad os liberará.’’(Juan 8:32)Pues ya ve, ya escuché varias veces esas palabras, hasta que entendí que sólo esta Verdad puede liberar de ese desequilibrio masivo que dominó el mundo, que sólo esta Verdad puede llevar a conocer una familia realmente feliz, y hacerle ser una persona feliz.
Isabella Barboza
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